Cómo crear un seminario o taller

Si te gusta la enseñanza y hablar en frente de una multitud, la presentación de seminarios puede ser una experiencia divertida y gratificante. Si eres empleado, ser conocido por tu habilidad para hablar es una buena manera de avanzar en tu carrera. Si eres dueño de un negocio, la presentación en los talleres o seminarios es un camino viable para desarrollar tu base de clientes y construir tu reputación como un experto.

Selecciona tu tema de presentación basado en tu experiencia y objetivos y en las necesidades de tu público objetivo. Por ejemplo, si estás desarrollando un programa de capacitación para un empleador, tu meta podría ser que se gradúen por lo menos el 90 por ciento de los participantes. Sin embargo, si el taller te pertenece, tu objetivo principal podría ser el establecimiento de tu experiencia percibida en tu campo.

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Elige un formato de presentación. Un taller es práctico, con los participantes que están comprometidos por hacer, construir, crear o aprender una habilidad. Por ejemplo, en un taller titulado "superar el miedo" podría haber participantes que tengan que meter sus brazos en una trampa para osos. Un seminario es menos participativo. Los asistentes pueden responder o hacer preguntas a la presentadora o presentador, pero por lo general no se hacen otras cosas.

Establece la duración de tu presentación sobre la base de la cantidad de material que se deseas transmitir y de las necesidades de la audiencia. Por ejemplo, si estás ofreciendo un curso de certificación es posible que tengas un programa de dos a tres días. Si, en cambio, estás enseñando una clase de manejo del estrés, se puede completar en dos a cuatro horas.

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Crea un esquema para el flujo de tu presentación. Para cada segmento de dos horas, determina tres a cinco puntos claves para la audiencia. A partir de los puntos de aprendizaje, profundiza en la presentación desde el principio a través de los puntos de resumen. Luego regresa a través de ellos varias veces para profundizar.

Selecciona ayudas visuales para tu presentación. Estos pueden incluir una presentación de diapositivas o una presentación de PowerPoint, una tabla, un video, una demostración, juegos de rol, los elementos extraídos de una caja de sorpresas, animales vivos, un juego o concurso, o incluso de alimentos o bebidas, en función del tema del taller. Asegúrate de que las ayudas visuales son claras y concisas, y que se puedan ver desde cualquier punto de la audiencia y no contengan errores o se contradigan entre sí. Una ayuda visual debe añadir a la presentación. Si no lo hace, no las coloques.

La práctica del taller en un grupo da pruebas de que estás dispuesto a ofrecerles información. Un club como Toastmasters Internacional es un buen lugar para que practiques y obtengas información detallada. También puedes grabar un vídeo de la presentación para tu propia revisión y enviarlo a uno o más evaluadores. También tienen tus evaluadores que darte su retroalimentación con respecto a las ayudas visuales, folletos y tu apariencia personal.

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